SEÑOR, MI DIOS
Concédenos iniciar este día fortalecidos con la protección de nuestra Madre santísima y ayudarnos a recordar que para que nuestra fe se haga más eficaz en nuestra vida y entorno, es necesaria la oración. Sabemos que es un trabajo de todos los días, es por ello que te pedimos nos acompañes en la edificación de Ti en nuestro interior.
Yo te amo, Señor, tú eres mi fortaleza.
AMEN.
BUEN DÍA.
FELIZ Y BENDECIDO SÁBADO.