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El llanto de Dios en Gaza – una llamada a la paz ante la violencia perpetrada por las tropas israelíes

¿Cómo puede la Iglesia católica consolar a los fieles en medio de la violencia y el sufrimiento en Gaza en Navidad?

El ataque israelí a la parroquia católica de la Sagrada Familia en Jerusalén ha sido condenado por el Patriarcado Latino de Jerusalén, donde dos mujeres fallecieron y siete feligreses resultaron heridos mientras intentaban rescatar a personas dentro de la iglesia. Mientras la Iglesia se prepara para celebrar la Navidad, el párroco de Gaza, el padre Gabriel Romanelli, describe la dificultad de vivir bajo constantes bombardeos, con paneles solares y contenedores de agua destruidos, y la falta de alimentos, junto con las lluvias que están afectando a los desplazados.

El padre Gabriel, misionero del Instituto del Verbo Encarnado (Ive) y de origen argentino, permanece en Belén desde el ataque de Hamas a Israel el 7 de octubre y no puede regresar a Gaza. A pesar de la situación, comparte su deseo de volver con sus feligreses y lamenta que las festividades navideñas, incluida la visita del cardenal Pierbattista Pizzaballa, hayan sido canceladas.

En vista de la guerra en curso, la parroquia latina de Gaza ha optado por vivir la Navidad exclusivamente dentro de las iglesias, renunciando a actividades y signos festivos innecesarios en solidaridad con aquellos que sufren a causa del conflicto. El padre Gabriel anhela una tregua verdadera como regalo navideño, deseando que las armas callen, que los heridos y enfermos sean atendidos, y que los prisioneros y rehenes sean liberados.

El sacerdote también hace un llamado a la comunidad internacional para que brinde ayuda a los habitantes de Gaza, quienes se enfrentan a la destrucción de su ciudad. La comunidad parroquial de Gaza está llena de esperanza y reza por una verdadera tregua, ofreciendo continuas oraciones en la iglesia a pesar de las condiciones precarias. El padre Gabriel enfatiza la importancia de preservar la presencia de Jesús en medio de la situación difícil y valora el papel de la iglesia en la vida espiritual de los creyentes y en el servicio a la comunidad.

Ante la tragedia de la guerra, el padre Gabriel alienta a los fieles a mantener una actitud de fe y caridad, destacando la importancia de brindar esperanza a todas las personas que viven en Gaza. A pesar de los desafíos, el padre Gabriel permanece comprometido con su misión en Gaza, reconociendo la importancia de estar cerca de aquellos que sufren y compartiendo el sufrimiento de la comunidad.

El sacerdote también invita a reflexionar sobre la Cruz y la importancia de consolar a los inocentes en medio de la Navidad, recordando la conexión entre el nacimiento de Jesús y su sacrificio en la cruz. El padre Gabriel hace un llamado a orar por el don de la paz en un momento en el que muchas vidas inocentes claman por consuelo y justicia.

La situación en Gaza continúa siendo un desafío para la comunidad cristiana, pero el padre Gabriel se sostiene en la fe y en el apoyo del Papa Francisco, el cardenal Pierbattista Pizzaballa y muchas personas que claman por la paz y la justicia en medio del conflicto.

En conclusión, el padre Gabriel Romanelli nos insta a mantener la esperanza y a orar por la paz en medio del sufrimiento, recordándonos que la Navidad es un momento de solidaridad y compasión hacia aquellos que más lo necesitan.

Con información de acnmex.com