No ganamos nuestra salvación, ni descubrimos a Dios por nosotros mismos, pero estamos llamados a estar despiertos cuando Él aparezca en nuestras vidas. Esto significa, más que cualquier otra cosa, que debemos perseverar en nuestros esfuerzos por vivir nuestra Fe y hacer la voluntad de Dios.
https://t.co/P7vNNTtQhn
Fuente Original por Catholic Exchange