✝
¿Cómo ha sido recibido el nombramiento de Jorge Ignacio García Cuerva como arzobispo de Buenos Aires debido a su simpatía por el peronismo?
La reciente elección del arzobispo Jorge Ignacio García Cuerva como nuevo líder de la iglesia en Buenos Aires ha sido acogida con entusiasmo por muchos sectores religiosos argentinos que lo ven como un líder adecuado para guiarlos hacia un futuro más justo y solidario. García Cuerva ha sido elogiado por su compromiso con las periferias, su compromiso con los pobres y su excelente formación jurídica y teológica.
Nacido en la ciudad de Río Gallegos en 1968, García Cuerva es un sacerdote incardinado en la diócesis de San Isidro desde 1997. A los 49 años, fue nombrado obispo auxiliar en Lomas de Zamora, donde fue ordenado en marzo de 2018. Su lema episcopal es “No apartes tu rostro del pobre”, una expresión tomada del Libro de Tobías 4,7.
En enero de 2019, fue trasladado a Río Gallegos. El papa Francisco lo nombró miembro de la Congregación para los Obispos en julio de 2021, y el 26 de mayo de 2023, fue promovido a arzobispo metropolitano de Buenos Aires, sucediendo al cardenal Mario Aurelio Poli.
Sin embargo, no todos recibieron la noticia con agrado. Algunos medios de comunicación criticaron su supuesta simpatía por el peronismo, así como sus supuestos vínculos con Sergio Massa, una figura política controvertida en Argentina. García Cuerva ha aclarado que no está “atrapado” en el peronismo y que, aunque lo respeta, su lealtad es con la iglesia y con los pobres.
El peronismo, un movimiento político que dominó la escena argentina durante la primera mitad del siglo XX, fue un gobierno popular que luchó contra el imperialismo y las oligarquías locales. Organizó a los trabajadores en un sindicato fuerte y cohesionado, les dio una conciencia social y política y promulgó muchas leyes sociales. Sin embargo, la demagogia y la corrupción llevaron al país a una crisis económica y social.
La jerarquía católica en Argentina apoyó abiertamente a Perón en un primer momento, pero pronto se enfrentó a él y a su movimiento debido a que no cumplió con los acuerdos relacionados con la defensa de la escuela privada católica y la indisolubilidad del matrimonio. Los sacerdotes tercermundistas, que estaban activos en los años 70, también preocupaban a la jerarquía católica, que los condenó públicamente.
La teología del pueblo, una corriente que surgió en Argentina durante este período, se basa en la unidad del pueblo para resolver conflictos, no en la lucha de clases. Bergoglio, que estudió con el teólogo Juan Carlos Scannone en el Colegio Máximo de San Miguel, ha hecho hincapié en la importancia de la unidad y la cohesión en su pensamiento. Ha señalado que el todo es más que la suma de sus partes, que la realidad es más importante que las ideas y que el tiempo prevalece sobre el espacio.
García Cuerva, como primer arzobispo después de la elección del Papa Francisco, probablemente estará en línea con su enfoque pastoral centrado en la solidaridad y la justicia social. La nueva elección puede significar un paso importante para la Iglesia en Argentina, que se enfrenta a numerosos desafíos en un país que ha experimentado una serie de crisis políticas y económicas en las últimas décadas. Con su lema episcopal de no apartar los ojos de los pobres, García Cuerva puede ser un líder adecuado para guiar a la Iglesia hacia un futuro más justo e inclusivo para todos los argentinos.
✝
Con información de ReligionDigital.org
