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El arzobispo de Canterbury y primado de la Iglesia Anglicana, Justin Welby, ha revelado que ha sufrido presiones por parte del Parlamento del Reino Unido para que la Iglesia de Inglaterra permitiera el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Esta decisión ha generado una gran controversia, llevando a una posible ruptura de la comunión con las iglesias anglicanas de los países del sur global, más conservadores.
¿Cómo afectará esta polémica decisión a la unidad de la Iglesia?
El domingo, el Primado de la Iglesia Anglicana, el Arzobispo de Canterbury, Justin Welby, reveló que fue presionado dos veces por el Parlamento del Reino Unido para que la Iglesia de Inglaterra aceptara el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Esto provocó polémicas, ya que la semana pasada el Sínodo General de la Iglesia tomó la decisión de bendecir los matrimonios civiles de las personas del mismo sexo, pero no casarlas.
La asociación de las iglesias anglicanas de los países del sur global, más conservadoras, se planteará la ruptura de la comunión con la Iglesia de Inglaterra.
Welby explicó que la obediencia a Dios va por delante que la lealtad al país.
Esto no fue bien recibido por algunos parlamentarios, quienes le amenazaron con acciones parlamentarias si no se aceptaba el matrimonio homosexual.
El propio primado de la Iglesia Anglicana aseguró que preferiría ver cómo la Iglesia era despojada de su estatus oficial en el Reino Unido antes que perder a las iglesias anglicanas de otros países.
La Iglesia de Inglaterra acepta desde 2014 que sus sacerdotes estén en uniones civiles del mismo sexo siempre que acepten el celibato.
Esto no contenta a las iglesias anglicanas de África, defensoras de la doctrina tradicional sobre el matrimonio.
La Compañía de Iglesias Anglicanas del Sur Global (GSFA por sus siglas en inglés) tenía previsto debatir desde este lunes sus próximos movimientos.
La Iglesia de Inglaterra quiere mantener la unidad de la Comunión Anglicana.
Por ello, se compromete a respetar la conciencia de aquellos para quienes esto va demasiado lejos y asegurarse de que reciban las garantías necesarias.
No obstante, esto no ha impedido que algunos políticos laboristas y conservadores hayan criticado las explicaciones del Primado Anglicano.
Es importante recordar que el matrimonio es un sacramento sagrado para los católicos y otros cristianos.
Por lo tanto, la Iglesia de Inglaterra debe ser fiel a la enseñanza de la Biblia y a la doctrina de la Iglesia Católica.
Esto significa que la Iglesia debe seguir trabajando para respetar la dignidad de todas las personas, sin importar su orientación sexual, pero al mismo tiempo debe mantenerse fiel a sus principios y enseñanzas.
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Con información de alfayomega.es | Foto Créditos: alfayomega
