Sin su Locura de Amor, sin su Sacrificio perpetuo, sin el Si de la Madre de toda la humanidad. Qué sería de nosotros?
Qué tristeza de las almas que andan sometidas a la carne putrefacta.
Qué dicha de las Almas que dominan el Todo del hombre y reflejan ese "hechos a imagen y semejanza del Padre"
Qué alegría por las conversiones y por los que te aman Abbá
Amén
Comentario
Compartir