ESTAMOS POR TERMINAR EL AÑO SANTO DE SAN JOSÉ, meditemos sobre algunos títulos en que la iglesia venera a este Santo Patriarca.
Día 1: El regalo de San José; Necesitamos un protector imagínate que en este momento te llega un mensaje de una persona desconocida. O ahí, justo donde estás, de repente alguien toca la puerta,pronuncia tu nombre. Te levantas, abres y ahí está este hombre… San José. El día de hoy te invito a pensar en un hecho muy importante que está ocurriendo justo ahora en tu vida de fe. San José ha aparecido hoy en tu vida. ¿Qué hacer? ¡Alegrarse! Porque este hecho también lo vivió Cristo.Cuando Él abrió sus ojos por primera vez en Belén, vio también a José, su padre. Le estiró sus brazos, se dejó cargar por él. Disfrutaba ver cómo San José se inclinaba hacia Él para susurrarle cosas al oído. Y con su corazón de niño, agradeció haber recibido el regalo de San José. ¿Y qué tan conscientes somos del don de San José? Es por eso que en este primer día, te invito a dar gracias a Dios por este don. Él, por el amor que te tiene, quiere darte también a ti este regalo. Y San José sonríe. Se alegra también de que haya llegado este momento. Él se compromete a acompañarte de ahora en adelante.

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